Combinación de experiencia
Bell & Ross, marca nacida bajo el signo de la complementariedad, hace de la colaboración el principio fundamental del diseño y la fabricación de sus creaciones. Usuarios profesionales, diseñadores, ingenieros y maestros relojeros unen sus competencias y experiencias en torno a un único lema: que lo esencial nunca deje lugar a lo superfluo.
El arte de la relojería suiza
Es en Suiza donde los maestros relojeros desarrollan, ensamblan y realizan los ajustes finales de los relojes Bell & Ross. Todo su arte queda patente en la precisión de las mediciones, el rigor de los controles y el esmero que ponen en cada etapa del trabajo con independencia de cual sea la complejidad mecánica del reloj.
Materiales diseñados para condiciones extremas
Bell & Ross da prioridad a materiales de altas prestaciones que combinan tecnicidad, durabilidad y diseño. La cerámica, heredada de la aeronáutica, ocupa un lugar central en sus creaciones: ligera, resistente a los arañazos, termorreguladora e hipoalergénica. El acero garantiza robustez y elegancia. El titanio ofrece ligereza y comodidad. El bronce se patina con el tiempo, confiriendo un carácter único. El oro de 18 quilates encarna el prestigio, mientras que el zafiro, de una dureza excepcional, garantiza transparencia y durabilidad. El LM3D, un material desarrollado por Bell & Ross, tan ligero y resistente como la fibra de carbono, difunde la luminiscencia.

















